Viaje a los Balcanes- um relato de Marta Peixoto

Les voy a contar un poquito de uno de los más fascinantes y diferentes viajes que he hecho en mi vida.
Como fueron 11 días y 2.600 km recorridos en una camioneta seleccioné algunos pocos sitios por donde pasamos.
Llegué a Zagreb para encontrar a mi hija casada con un croata y con ellos y un amigo, también guía turístico como mi yenro, hicimos un tour por los Balcanes a sitios donde ni siquiera los europeos suelen visitar. En la región de los Balcanes se encuentran tres diferentes religiones y culturas conviviendo, ahora pacíficamente ,después de haber vivido años en terribles guerras y muchas muertes.
Ya conocía Zagreb, la Capital de Croacia con sus iglesias católicas y ortodoxas en el centro, sus edificios, plazas, fuentes, parques, cafeterías, restaurantes y ahora llena de flores.
Croacia, país de diferentes culturas de una linda costa y más de 1.200 islas fue la barrera que impidió la entrada del islamismo a Europa Occidental.
Fuimos de Zagreb a Bosnia Herzegovina cuya capital Sarajevo es conocida mundialmente por el asesinato de Franz Ferdinand por un serbio lo que originó el comienzo de la 1ª guerra mundial.
Lo que más me impresionó en Sarajevo fue la cantidad de mezquitas con sus minaretes al lado de iglesias católicas y ortodoxas. El sonido de la llamada para orar a Alá en las mezquitas (5 veces al día) así como el de las campanas invitando a ir a misa en las iglesias católicas, las mujeres musulmanas con sus pañuelos en la cabeza (con burka había muy pocas) en medio de la gente y muchos turistas daban a esa ciudad una atmósfera indescriptible.
Sus callecitas medievales en el centro de la ciudad donde cada una vende sus productos como joyas, alfombras, ropas,objetos de metal, recuerdos típicos etc además de las cafeterías donde tomamos café turco, burek, pita, yogur, y cevapi ,todo una mezcla de las culturas oriental y occidental.
Subimos a las montañas del Parque Nacional del Durmitor (Montenegro] , llegando a 2.600 m de altura, cruzamos el puente del río Drin donde sus aguas de un azul turquesa impresionan por su rara belleza.
Llegamos a Zabljak[ Montenegro] donde nos quedamos unos días en una casita de madera de esa estación de ski muy conocida[ de ellos] y allí, el verano europeo se había transformado en un invierno de 6 grados por lo menos en aquellos días que allí estuvimos.
Fuimos después a Kosovo, la más joven república del mundo pues se independizó de Serbia hace dos años con un tráfico caótico a la llegada y donde muchos táxis eran coches ingleses.
Después fuimos a Skopje, capital de Macedonia, país conocido por Felipe y Alejandro, el Grande. Ciudad muy linda con edificios modernos en medio a estatuas, mezquitas y cafeterías. El moderno”parador” donde nos quedamos Vila Ane está ubicado en la Calle Salvador Allende, imagínense Uds!
La lengua con la cual nos comunicábamos con la gente era el croata [y el inglés cuando necesario, en Kosovo y Albania] Suerte que los míos lo hablaban!pues el serbio croata era el idioma oficial de Yugoslavia y estos países,ahora independientes, hacían parte de ella.
Estuvimos en Tirana, capital de Albania, país conocido por la enorme cantidad de bunkers construídos si hubiera guerra. Ciudad con sus anchas avenidas, edificios de muchos colores, un contraste entre lo antiguo y moderno, una cantidad enorme de coches Mercedes Benz parecía querer desmentir la idea de una nación pobre que figuraba en los libros .
Después de haber probado las comidas típicas de cada país, escuchado sus músicas, aprendido un poco de su Historia y cultura, salgo de este viaje entendiendo un poquito más de esta importante y conflictuada región pero al mismo tiempo llena de curiosidad por saber más sobre esos países tan desconocidos y lejanos a nosotros de América del Sur.